lunes, 7 de septiembre de 2009

Kage (Sombra) y Machi (Ciudad)

  • Título: 影 –Kage – (Sombra) y 街 –Machi– (Ciudad)
  • Autor: Varios
  • Editorial: Shōgakukan Creative (edición facsímil)
  • Revista: ---
  • Años publicación: 1956-1966 (Kage) y 1957-1962 (Machi) / 2009 (edición facsímil)
  • Clasificación: seinen, gekiga
  • Tomos: 120 (Kage) y 63 (Machi)

Portada de Kage 1

Leyendo la obra Gekiga Hyōryū, el manga autobiográfico de Yoshihiro Tatsumi, es imposible refrenar los impulsos para ampliar, por poco que sea, los conocimientos sobre el manga de la época que aparecen en el libro. O si no ya me diréis cuando os leáis la edición española de este interesantísimo libro que está preparando Astiberri...

Una de las cosas que más llaman la atención de la época en la que Yoshihiro Tatsumi, Takao Saitō y Masahiko Matsumoto, entre otros, estaban creando las fundaciones de lo que poco después se conocería como gekiga (dibujos dramáticos) y que ahora se conoce como seinen manga (manga para adultos) es el tema de sus primeros pinitos con los libros-revista, sobre todo Kage.

En los años 50, la edición de manga estaba clarísimamente dividida en dos tipos de editoriales, que tenían rutas totalmente distintas de publicación y distribución. Mientras las editoriales grandes publicaban revistas infantiles que incluían manga (de Osamu Tezuka, Fujiko Fujio, Shōtarō Ishinomori, etc.) que se vendían en las librerías de todo Japón, había otras editoriales, mucho más pequeñas y humildes, que centraban su negocio en publicar tomos de manga exclusivamente para la red de librerías de alquiler kashihon’ya y con distribución limitada a zonas concretas. En los años 50 había kashihon’ya por todas partes en las que, por un módico precio, uno podía alquilar un manga o una novela para leer tranquilamente en casa o en la misma tienda.

Portada de Machi 1

Tatsumi y los suyos trabajaban para este último mercado de librerías de alquiler, un mercado en el que, por supuesto, había muchos menos tabúes y manías respecto a qué era lo que se podía publicar y cómo. Como se cuenta en Gekiga Hyōryū, un día los jóvenes y motivados creadores que trabajaban para la editorial de Osaka llamada Hinomaru Bunko tuvieron la idea de unirse para crear antologías de historias cortas de misterio y detectives. Así, en vez de dedicar un solo autor varios meses de su tiempo a realizar un libro unitario, entre varios podían unirse para, con solo unas pocas páginas al mes cada uno, poder lanzar un libro mensualmente, numerado como si fuera una revista. Así es como nació Kage (Sombra), en 1956. Kage obtuvo un gran éxito y, cómo no, poco después empezaron a salirle imitadores por todas partes. Incluso, como nos cuenta Tatsumi, los propios autores de Kage empezaron a comprometerse con otras editoriales para realizar otras de estas cabeceras, como Machi (en la que no participó Takao Saitō porque el tipo no tendía a caer muy bien).

En febrero de este año, la editorial Shōgakukan Creative (ojo a esta editorial porque lo que están haciendo desde hace solo unos pocos años con reediciones facsímil de obras de manga clásico es increíble) tuvo la genial idea de crear una edición facsímil de los números 1 de Kage y Machi para saciar la curiosidad de gente como yo mismo. Y es que en 2009 se conmemora el 50º aniversario de la acuñación de la palabra gekiga, un movimiento del que Kage y Machi son los embriones.

Página de la interesantísima historia El hombre de la habitación contigua, incluida en Kage 1

La edición de Shōgakukan Creative imita perfectamente la edición original de ambas revistas, tanto en tamaño como en aspecto. Lo único que han añadido es una pequeña página extra de créditos al final de cada libro, pero aparte de esto, la edición es exacta a la de los años 50 de ambos libros-revista: así, ambos cuentan con unas 96 páginas, tienen tapa dura, un primer pliegue de páginas a todo color y el resto de los pliegues impresos con tintas de colores cambiantes. Ambos libros vienen en una caja de cartón y están acompañados de un folleto con interesantes artículos complementarios, como por ejemplo una entrevista a Takao "Golgo 13" Saitō, una cronología, etcétera.

Leídas ahora las historias contenidas en Kage y Machi, la verdad es que parecen más bien pueriles, pero si lo colocamos en su contexto, en el que el manga era solo para niños y tenía unos contenidos francamente anodinos y planos, puedo comprender la revolución que armaron al crear un tipo de manga no para niños (lo normal en la época), sino para lectores adolescentes y adultos que habían crecido leyendo las obras de Tezuka y compañía y que querían seguir leyendo cómics, aunque no infantiles. En Kage 1, por cierto, se incluye la legendaria historia Rinshitsu no otoko (El hombre de la habitación contigua) de Masahiko Matsumoto, una obra que impactó enormemente a Tatsumi y a los demás autores de su círculo y que moldeó los inicios del manga para lectores adultos, con violencia realista, sangre, muertes y un uso impresionante de las técnicas cinematográficas para absorber al lector.

Las demás historias incluidas en ambos títulos tienen altibajos, ya que las hay bastante aburridas, pero otras, sobre todo las de Tatsumi y Matsumoto, resultan muy interesantes pese a su evidente “primitivismo” visto ahora. Ni que sea para observar la evolución increíble de Takao Saitō (el autor de Golgo 13, Survival y Breakdown, recordémoslo) desde su anodina primera historia para Kage hasta ahora, o la evolución en dibujo y estilo que ya hay entre las obras de Tatsumi y Matsumoto entre 1956 (en Kage 1) y 1957 (en Machi 1) vale la pena hacerse con esta magnífica edición facsímil.

2 comentarios:

Moroboshi dijo...

Així que Astiberri prepara un llibre sobre això tan interessant que expliques i que, com sempre, m'hauré d'esperar uns quants anys per poder-ne gaudir...

Quina sort que teniu els que sabeu japonès, cagontot! :D

Quan llegeixo el teu bloc m'ho passo bé i alhora m'emprenya no poder accedir al mateix que tu, he he... Però de vegades busco si alguna de les obres que comentes estan publicades per Europa en un idioma que jo comprengui mínimament i hi ha alguna sorpresa al respecte.
Naturalment, no és el cas del que comentes avui.

Ichi dijo...

Muy interesante! :-)